Posted on abril 19, 2022 View all Carta del Párroco
Queridos hermanos y hermanas,
¡Feliz Domingo de Resurrección! ¡Jesús ha resucitado de entre los muertos! Este anuncio resuena en la Iglesia en todo el mundo junto al canto del Aleluya, Él está vivo para siempre en medio de nosotros. Esta Buena Noticia se ha encendido como una llama nueva en la noche Santa de la Vigilia, en la noche de un mundo que enfrenta desafíos cruciales, por la guerra, y por todas las pruebas que entorpecen la vida de la humanidad.
Hoy debemos de estar agradecidos porque pudimos reunirnos como familia para celebrar Su resurrección, y ese el motivo de nuestra alegría; una alegría que se tiene que volver contagiosa, porque nos tiene que hacer perder el miedo. Es un “contagio, que se transmite de corazón a corazón, porque todo corazón humano espera esta Buena Noticia. Es el contagio de la esperanza: “¡Resucitó de veras mi amor y mi esperanza! No se trata de una fórmula mágica que hace desaparecer los problemas. Debemos de entender que la resurrección de Cristo, es la victoria del amor sobre la raíz del mal, una victoria que no ‘pasa por encima’ del sufrimiento y la muerte, sino que los traspasa, abriendo un camino en el abismo, transformando el mal en bien, signo distintivo del poder de Dios” (Papa Francisco, mensaje Pascual 2020).
Como parroquia, en medio de esta alegría pascual quiero invitarlos a que esta celebración pascual se vea reflejada en nuestro compromiso de fe, y en el incremento de nuestro amor por la parroquia. Muchos aún no se atreven a volver a las misas presenciales, me imagino que aún tienen miedo, y le pido a Dios por ellos, porque sé que es difícil. Jesús ha resucitado y es tiempo de volver a casa, es tiempo de vencer el miedo, es tiempo de comenzar a disfrutar de la vida sacramental; también de comenzar a dinamizar las actividades pastorales. Creo que es importante reflexionar en nuestro compromiso bautismal, ese compromiso debe de reflejarse en la participación activa en los ministerios parroquiales, necesitamos más lectores, ministros extraordinarios de la comunión, y más ujieres. Tenemos que resucitar con el Señor y comenzar a dinamizar más nuestra parroquia y hacer que nuestros ministerios vuelvan a florecer.
Invito a todos que felicitemos a nuestros hermanos en la fe que recibieron los sacramentos de iniciación en la Vigilia Pascual. Es motivo de alegría porque nuestra familia espiritual tiene ahora más miembros; también felicitemos y demos la bienvenida a los hermanos que recibieron el sacramento de la confirmación e hicieron su profesión de fe, y ahora ya tienen plena comunión con nosotros en la fe católica.
Finalmente, agradezco a todos los voluntarios de nuestra parroquia: ujieres, lectores, ministros extraordinarios, sacristanes y música, que en comunión con el personal de la parroquia han hecho un gran esfuerzo para que la liturgia en estos días especiales de Semana Santa fuera muy bella y con gran dignidad, sepan que ustedes son muy importantes para mí y tienen un lugar muy importante en mi corazón.
¡Feliz Pascua de Resurrección!
P. Alex
